Sexta sesión: Poesía en las historias naturales
Después de realizar trabajo de campo en la región de Madre de Dios y de doctorarse con una tesis sobre “El valor etnográfico de las Crónicas de Indias”, el investigador del CSIC, Fermín del Pino, se convenció de la condición privilegiada que las crónicas ofrecen como objetos de estudio donde sustentar los ancestros de ciertas disciplinas.
La lectura de proto-etnógrafos como José de Acosta, que se proponen describir la novedad de las Indias recién halladas, y la apertura metodológica a la que esa novedad les obliga le llevó a considerar este tipo de documentos, que se clasifican o se auto-sitúan dentro de la “historia natural”, como especialmente susceptibles de recibir un acercamiento de acuerdo con las líneas más recientes de la antropología última.
De hecho, será John Howland Rowe el primero en subrayar al mismo Acosta como un cronista que se orienta por un punto de vista antropológico. Ese punto de vista se ve favorecido y alentado por la tendencia habitual en el humanismo renacentista a la recuperación del pasado.
En un artículo ya mítico, The Renaissance Foundations of Anthropology, publicado en 1965 dentro de la revista American Anthropologist, Rowe insistía en la importancia que el recién inaugurado pensamiento humanista y su estudio de restitución de la antigüedad clásica supuso en la aceptación de la otredad indiana. La conceptualización de la barbarie se flexibiliza en virtud de aquel y sirve para sensibilizar al cronista respecto a los valores propios de estas sociedades distintas, pero igualmente dignas de estima.
Las Indias aportan a este proceso de flexibilización su paisaje y la condición única y no comparable de su naturaleza que pasa a ser un objeto de análisis. Ya hacia 1911 Edward Feuter había defendido una propuesta semejante, al proponer la inclusión de la historia natural como un elemento legítimo de los estudios historiográficos.
En una recuperación similar de la crónica de sesgo naturalista, quiso inscribir Fermín del Pino su edición para el CSIC de la que firmara José de Acosta y ahora también la que lleva unos años preparando con el profesor de Colby College, Luis Millones, que en este caso escribiera Bernabé Cobo.
En ambos, junto con la General y Natural Historia de Gonzalo Fernández de Oviedo, Fermín del Pino reconoce la necesidad de emplear herramientas de exégesis procedentes de diferentes campos disciplinarios, dado que sus noticias competen a la cosmografía, los saberes clásicos, la retórica, la iconografía, la ecdótica o la teología, tanto como a la etnografía y la historia. El alto contenido poético de algunas descripciones de Acosta obligaría a estar atento a su tejido descriptivo y a destinarle acercamientos literarios, reivindicando estas crónicas para un acercamiento interdisciplinar y tan mestizo como su misma factura.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!